DON´T GIVE UP NEVER GIVE UP
Bueno, damas, caballeros y mis amigos, bienvenidos al espacio menos visitado del mundo, he aqui un metodo de descarga muy poco utilizado, extraño, incoherente, que cambia de idea cada 2 posteos y que revela las facetas de la personalidad de un adolecente cuando realmente necesita expresar algo para un publico de 2 o 3 personitas, preparense... lo que les espera, podria sorprenderlos :)







27 sept 2010

Prologo 2 (Terminado)

“Maldición” – Pensó el Doctor Bathory – “Nunca podré abrir esta asquerosa puerta”.

La “puerta”. Así le decía Bathery a la única abertura de la Caja, hecha de un material que Bathory no podía comprender. Tenía un color dorado alrededor pero no era oro. Tampoco era algún tipo de pintura o algún mineral extraño.

No brillaba. Simplemente, era dorado. Había sido entregada como La Caja por su anterior dueño. No tenía mucha información sobre él, pero prefirió mantener el nombre. De todas formas, era solo un nombre, y efectivamente parecía una caja. Se la habían dejado a Bathory para que la abriera.

Luego del décimo intento, Bathory suspiró resignado, sentándose sin saber que más hacer. Hacía semanas que trabajaba con esa extraña caja. Solo porque él se lo había pedido.

Él. Ese sujeto tan despreciable… Cuando lo miraba le recordaba de algún modo a una serpiente. Tenia ojos amenazadores y caminaba de una forma tan extraña que daba la sensación de ser una serpiente arrastrándose por la calle. Por alguna razón, le temía. Si no fuera porque le debía aquel favor…

Cuando su madre murió, Él, pagó las deudas de ella. Bathory, totalmente confundido ante la misteriosa aparición, preguntó “¿Porque hizo eso?, ¿Acaso conocía a mi madre?”

“No” – Replicó – “Simplemente, recuerde esto. Quizás, algún día pueda pagármelo.”

Esa si que fue una respuesta extraña. Es como si esperaba que esto sucediera.

Volvió a mirar la foto de su madre. Parecía tan joven y alegre… Aun no podía tirar aquella foto, y cada vez que la miraba volvía la inolvidable punzada de dolor.

“Basta, la Caja es mas importante. Me dio una semana. Y ya se cumplió el plazo hace mas de dos horas.” Pensó.

Mientras Bathory giraba para agarrar la caja se quedó inmóvil.

“Estoy seguro que la caja estaba más cerca.” Guiado por un instinto incomprensible y volvió a girar su cabeza dirigiéndola hacia la foto. La foto estaba intacta… No, no lo estaba, tenía una especie de mancha negra. Incapaz de retirar la mirada de la foto, atinó a limpiarla con su camisa, pero la mancha… Ya no estaba.

Fue en ese exacto momento que a Bathory se le ocurrió pensar que la mancha era un reflejo. Y que había alguien detrás de él. Maldiciendo su idiotez y falta de reacción, se dispuso a gritar.

Lamentablemente antes que lo lograra, dos poderosos brazos lo atraparon y lo tiraron al suelo. Entonces el sujeto de negro mostró el mango de un arma y la saco de su funda.

Bathory observó la espada con sus ojos desorbitados.

Acaba de reconocer esa espada. No era cualquier espada. Era de plata, pero no cualquier plata. Era especial. Tenía grabado unos símbolos extraños para cualquiera salvo para quien la conociera. Y Bathory la conocía. “La Espada Ceremonial, ¿Acaso tan importante soy?” – Dijo.

“No Doctor, Usted no. Pero está señalado. Usted tuvo la Caja. Por ende usted es el protector actual de esta.”

“¿Hace cuanto que ud y su grupo de locos me persigue?”

El sujeto de negro sonrió. Y sin responder, lo golpeó con el mango.

Sin esfuerzo, subió el cuerpo inerte a la terraza. Levantó la espada y atravesó al doctor con ella. La espada parecía feliz. Hacía mucho que no mataba. Ansiaba matar hace tiempo.

El sujeto de negro volvió feliz. Después de todo lo había logrado sin mucho esfuerzo. Miró el reloj. Tendría tiempo para llegar al Cuartel sin problemas. Solo fue, una muerte más. Un solo pasó más para llegar al objetivo. Estaba cada día más cerca. Miró la Caja. Agarró el telefono, y marcó.

“Señor, la tengo”.

1 comentario:

  1. Mentira. Aun no me gusta. Probablemente lo retoque, pero no lo pienso subir otra vez.

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